jueves, 11 de noviembre de 2010

Vote vote vote, el Papa va en el lote

¿Qué? ¿Ya habéis decidido vuestro voto?

Por si alguien no se ha enterado, esta noche empieza la campaña electoral previa a las elecciones al Parlament de Catalunya.

Yo, o más bien escrito mi alter ego, va a ejercer su derecho a participar en esta patraña demográcica que normalmente sirve para hacer creer al populacho entre el que me incluyo que tiene la posibilidad de hacer oír su voz a través de unas personas llamadas políticos el objetivo de los cuáles , en su mayoría, es llenarse los bolsillos de dinero público y permitir que se los llenen sus más allegados.

Esta no divina comedia nos permite, por lo menos, opinar, aunque no sirva de gran cosa. Muchos ejercen este derecho en forma de voto nulo o de voto en blanco, de forma muy legítima. Pero esta inconformidad con el sistema, esta rebeldía enfundada en un sobrecito, no sirve para gran cosa. Tampoco sirve de mucho la abstención que, cuatrienio tras cuatrienio, se hace más patente en la población gozosa de ese dudoso derecho.

Los motivos son obvios aunque los políticos no quieran verlos. El descontento, la desilusión, el desengaño sucesivo y la ya famosa desafección por, en y con la política.

También hay que tener en Cuenca que votar a alguien es excesivamente complicado. Ya es difícil ser plenamente compatible con una persona con la que decides convivir o compartir tu vida como pareja, como para encontrar un partido que exprese todas las ideas, objetivos y/o creencias de uno.

El sistema se perpetua esté quien esté aposentado en la trona y eso no va a cambiar, porque se ha estructurado de tal forma que, desde las más altas instancias a nivel mundial hasta las votaciones para escoger al presidente de la escalera (bueno, a lo mejor ahí me he pasado), todo gira en torno a intereses más o menos ocultos, a los que todos, tarde o temprano, sucumbimos(...no, no me he pasado). Me refiero a la también famosa, pero con mala fama, corrupción. Mucho se ha escrito y mucho se ha dicho y se han hecho películas sobre la renuncia de los escrúpulos y la anteposición de los intereses de uno mismo a los de los demás.

¿Formara parte de la Naturaleza humana este sucumbimiento?, es algo que ahora no estoy capacitado para responder.

Todos, al fin y al cabo, deseamos vivir mejor, subir un peldaño nuestra calidad de vida, aunque a veces no nos demos cuenta y no veamos el lujo y las comodidades de las que disfrutamos sin apenas ser conscientes de ello; un ejemplo: por el precio del Tip-pex que tengo en el escritorio, abarrotado de otros enseres + o – caros, una familia podría comer hoy, teniendo en cuenta que con un poquito de suerte sólo habrán pasado dos días desde su última ingesta en condiciones, mientras horneo un pollo a la sidra con patatas y un pan.


Ese sucumbir, ese claudicar y esa injustícia general me llevan a escribir sobre una cosa que pasó este fin de semana en la Ciudad Condal, la visita de su santidad el Papa para darse un garbeo en su bus turístico particular, que mas que visita turística hizo una especie de vuelta rápida a un circuito de solo ida e inaugurar cual Pujol, la basílica de la monumental Sagrada Família. Hereu le tendría que haber avisado que las carreras se hacían en Montjuïc, aunque entiendo que la etimología del topónimo no sea de su agrado, por mucho que se llenen la boca con la igualdad de las religiones y otras beodas y beatas costumbres. En boca de todos ha estado la imagen de unas monjitas limpiando el altar, la única aparición que hizo el género femenino en la actuación estelar papal. Y en boca de todos han aparecido opiniones a favor y en contra, de total beneplácito con el asignado rol de la mujer en estos casos o de rebeldía sublevadora contra una doctrina que margina y relega la mujer a un papel secundón bajo el yugo de las voluntades y los caprichos del hombre. La opinión que sale de mi puño y letra se decanta más hacia la segunda opción, y es que...hay tanto por cambiar.


En fin, que nos esperan unos días de hartamiento propagandístico, de presión influencista votatil, con TV3 diciendo que sus trabajadores quieren expresar su descontento con la ley electoral que restringe el espacio de anunciación de las virtudes de uno u otro equipo en función de la importancia del partido (electoral, que casi se nos mezcla una cosa con la otra). En mi opinión es un poco falso eso de poner un cartelito con el mensaje de que no suscriben la noticia que están dando. Pues rebelaros ostia; no hay firma, no hay noticia. Pero si les seguís siguiendo el juego ellos seguirán saliendo en los medios impunemente, con lo que encuentro inútil esta medida.


Hasta la próxima y que ustedes la/lo boten bien. Yo por mi parte ya tengo el sobrecito preparado.





martes, 9 de noviembre de 2010

Arrasando en el Mundial. Lo hemos ganado todo

Y llegó el día. Domingo por la mañana, de cara al televisor para poder ver la última carrera.

Por motivos ajenos a mi voluntad no pude ver los entrenos que conformaron las parrillas de las distintas categorías (y eso que lo intenté) pero pude enterarme del llamativo casco con el que correría Jorge Lorenzo, casco que me daría un poco de vergüenza llevar, con su baño dorado y sus reflejos swarovskianos, 12.000 € de chichonera, casi nada.


El algodón no engaña y los números no mienten. Nuestros pilotos han arrasado esta temporada. 2010 ha sido el año del motociclismo español, por si hay alguien que no se haya enterado todavía. Nuestros pilotos han okupado el podio en todas las carreras, en alguno de sus cajones, lo que nos ha llenado de alegrías y emociones. Se han roto récords de todo tipo, de puntos, de victorias, de tripletes...ooohhh, qué gran año este 2010. Vamos a tardar en olvidar el primer año de la hegemonía motociclista que espero que se perpetúe por mucho, mucho tiempo.

Esta repetición de éxitos nos ha venido muy bien en un año en que hemos gozado de las motos sin la puñetera pantallita que siempre aparecía en el momento más inoportuno, siempre con los mismos anuncios. Además, se le han dado más minutos en los medios de comunicación que hasta ahora solo hablaban de motos cuando algún piloto se hacía daño o había sufrido un accidente espectacular. Hasta se ha hecho una pequeña coña en el “Crackòvia”, programa de humor monotemático sobre fútbol, con alguna pequeña excepción, siempre con el cachondeo de las imitaciones, sin ver el potencial que tenían las caricaturas de Rossi, Lorenzo, Hayden, Simoncelli y su peluca...Solo espero que el año que viene no me comenten las motos ilustres tertulianos del Sálvame, como vienen diciendo los rumores.


Tras la maestral demostración del joven Márquez el fin de semana pasado en el circuito luso, nadie tenía muy claro lo que iba a pasar una vez se apagara el semáforo. Yo estaba tenso y expectante sentado en el sofá. Bradley Smith salió como un tiro y tras él se enganchó un Nico Terol que necesitaba imperiosamente que Márquez tuviera un incidente que no le permitiera pasar del octavo puesto. A estos tres terminaría por darles alcance un Pol Espargaró que quería despedirse de su poco veloz Derbi con un buen resultado.

Cuando parecía que Marc, que notaba el aliento en el cogote de Pol, iba a dar caza y captura de su paisano y atacar al inglés, se incorporó y le hizo un gesto a Espargaró para que lo adelantara. El de Cervera no quería correr riesgos y tampoco quería matar de un infarto a Emilio Alzamora o a su padre y escogió el pájaro en mano. Desde su cuarta posición pudo ver como el inglés rompía una racha increíble de victorias hispánicas, ya que desde el G.P. De Catalunya del año pasado no había ondeado otra bandera que la de España.

Pol le terminó disputando y ganando la segunda posición a Nico, que completó el podio.

Fue una carrera atípica de 125 c.c., un tanto aburrida. Los pilotos delanteros rodaron con mucha precaución y cautela, corrieron más con el cerebro que con el corazón. Corazón que se desbocó de alegría en el box de Márquez cuando se proclamó campeón del mundo del octavo de litro.


La de moto2 fue una carrera más movidita. La emoción estaba en el interrogante de poder tener a Julián Simón como subcampeón de la categoría intermedia, amenazado por un Iannone que lideró la prueba prácticamente de principio a fin, mientras Julito remontaba como un loco tras una pésima salida. Yo sufría por si Simón se iba al suelo porque el tipo iba a fondo pues no se podía permitir el lujo de quedar muy por detrás del italiano. Total, que mientras el de Villacañas se peleaba desde la décima plaza, un grupito formado por Scott Redding, Kenan Sofuoglu, Tomas Luthi, Toni Elías y algún otro se pasaba y repasaba persiguiendo a Andrea. Yo pensaba que Karel Abraham, que también estaba en la disputa, sería el que la liaría parda, porque iba muy agresivo y en momentos cruciales el tipo no aguanta el ídem.

A todo esto Julián ya había llegado y se había enzarzado en un cuerpo a cuerpo con varios pilotos que le impedían llegar al italiano, único que estaba en disposición de arrebatarle su segunda posición en el Mundial.

El cartelito de última vuelta aparecía en la pantalla y parecía que Toni Elías quería acabar su gran año con una victoria a toda costa, lo que propició que se terminara yendo largo y se tocara con Iannone, al que relegó a la segunda plaza. Esta refriega la aprovechó Karel para lograr su primera victoria en la categoría, una buena manera de pasar de clase. Detrás de ellos entró Julián Simón, que se proclamaba finalmente subcampeón del mundo en moto2.


Motogp fue un recital para un Jorge Lorenzo que permaneció agazapado hasta la vuelta 11. Stoner lideró la prueba con Dani Pedrosa, que también se jugaba el segundo puesto con Rossi, enganchado a su rueda hasta que fue perdiendo fuelle tras protagonizar una de sus espectaculares salidas desde el octavo puesto.

En la mencionada vuelta 11 Lorenzo se fue a por Stoner, dejando atrás a Valentino. Dani iba perdiendo posiciones.

Y cuando faltaban ocho vueltas, Lorenzo ha dado la estocada final y ha cruzado meta por delante del australiano, con Valentino en tercer lugar.

Dani consiguió quedar séptimo en carrera y segundo en el Mundial.


Bueno, retransmita quien retransmita las carreras el año que viene, espero que los cámaras y el equipo de realización no pretendan ser los protagonistas invisibles de las disputas motociclísticas y que no hagan lo mismo que han hecho en algunas ocasiones este año.

Quiero apuntar la voz entrecortada de Marc Martí, a mi parecer uno de los más profesionales de los que dan la cara y la voz cada fin de semana, cuando explicaba las circunstancias que impedirán que Alex Debón corra el año que viene, aunque esto de las motos es un poco incierto. Por último, y en mi opinión, creo que Dani Pedrosa debería pensar que si el año que viene no vence a su compatriota y se alza finalmente con el título, debería mirarse de bajar a moto2, categoría en la que por peso y condiciones sería un buen y digno rival.


Hasta el año que viene moter@s.

domingo, 31 de octubre de 2010

Estoril 2010. Esto se acaba

Bueno, en menos de una semana nos habremos quedado sin nuestro desahogo deportivo favorito. El próximo domingo termina el Mundial y nos vamos a quedar, como siempre, compuestos y sin novia, aguantando a los forofos del fútbol con sus partidos casi diarios entre Copa del Rey, Liga, competiciones europeas y los encuentros de la selección. Pero a eso ya estamos acostumbrados. A lo que no estamos tan acostumbrados es al número de alegrías que nos han dado nuestros pilotos durante su periplo por el mundo y no sé si terminamos de digerirlo como deberíamos.

Son varias las opiniones que he oído y leído sobre el hecho de que, habiendo ganado todos los títulos de pilotos en juego, teniendo por fin el relevo de Àlex Crivillé en la categoría reina después de tantos años de privaciones y desencantos, siendo campeones en la novedosa moto2 y con una hegemonía aplastante en 125 c.c., muchas de las personas que dejan sus opiniones en el chat de RTVE lo hagan usando un tono extremo y muy posicionado a favor de uno u otro piloto, descalificando e insultando a los partidarios rivales. Yo particularmente creo que, por suerte o por desgracia, todo cambia, y esto no podía ser menos (habría que analizar psicológicamente las causas que nos han impulsado a ello y si alguien quiere hacer una tesis sobre ello, yo me ofrezco como muestra). Todo cambia, incluso el carácter de los aficionados; se han vuelto como los hinchas de fútbol. Puede ser que parte de la culpa la tenga el trato que se le ha ido dando a la retransmisión de los eventos. Puede ser. Porque ayer me harté de escuchar ciertos comentarios de Ernest Riveras que nada tenían que ver con el motor y las dos ruedas y me cansé de recibir datos estadísticos que no me van a sacar de ningún apuro en una partida de Trivial. Pero tampoco creo que sea muy prudente quejarse porque el año que viene a lo mejor no tenemos ni eso, debido a la intención de RTVE de eliminar costes y por tanto vender los derechos a otra cadena, concretamente Telecinco. Sin comentarios, que ya habrá tiempo para hacerlos. En fin, que nos queda poco para disfrutar tanto de una cosa como de otra.

Portugal es una de esas citas mundialísticas donde todo sucede de forma un poco extraña. Por si fuera poco, les dio por aumentar los tiempos de entreno, aunque a la práctica no los pudieran aprovechar por la ingente cantidad de agua que cayó en Estoril, arruinando los entrenamientos y provocando una parrilla definitiva inhabitual.

Total, que el domingo, bajo los efectos del discutible beneficio del cambio horario y en clara inferioridad de género, me dispuse a ver los warm-ups y a ir escuchando cosas más o menos interesantes. Quiero recalcar que no entiendo muchas de las decisiones de dirección de carrera ni de Dorna ni tampoco su forma poco equitativa de aplicar un reglamento que reglan a su antojo. Por poner un ejemplo, en Qatar se suspendió la carrera y se pospuso al lunes. Si se hubiera anulado la carrera en Estoril, habrían empaquetado todo y se hubieran ido a Cheste sin correr; no pude saber el porqué de este trato, pero es fácil imaginarlo.

A las doce y cuarto empezaba el día con otra loca carrera de moto2, con un turco sorprendiendo a todos imponiendo un ritmo endiablado, con una moto y un pilotaje que parecían tener la ira de los mismísimos infiernos. Al final se terminó imponiendo la experiencia de los más veteranos en estas lides y fue un sorprendente Bradl el que se subió al primer peldaño de un podio que no había pisado en todo el año, bonita manera de empezar. No fue el mejor día para Julián Simón, que puede dar gracias a que Iannone se fue al suelo y terminó sin puntuar, como un Toni Elías demasiado relajado tras sus demostraciones de valor, coraje y pilotaje a las que nos ha acostumbrado.

El que no se relaja es Jorge Lorenzo. El mallorquín fue, vio y venció. Espero a tener todo en su sitio y cuando parecía que Rossi se alejaba hacia otra victoria que engrosara su ya enorme palmarés, él fue recortando la diferencia que les separaba y cuando lo tuvo claro se lo fulminó. Rossi no pudo hacer gran cosa para aguantar el ritmo que, vuelta rápida tras vuelta rápida, marcaba su ya por poco tiempo compañero de equipo.

Mientras Dani Pedrosa iba perdiendo fuelle, los pilotos de Honda que quedaban hacían lo que podían peleando entre ellos. Para quien no lo sepa, Marco Simoncelli me cae como una patada en los huevos, puede sonar mal pero es la pura verdad; su descerebrada conducción y sus arremetidas contra nuestros pilotos dieron mucho que hablar y que escribir y generaron en mí un odio hacia él. Pero este domingo merecía ganar a Dovizioso, rabioso viendo como un privado le ganaba la partida en inferioridad de condiciones.

Y llegó la carrera más esperada por mí. La que todavía tenía tres aspirantes al título, que se ha quedado en dos y que solo merece uno. Ese uno es, en mi opinión y compartida espero por muchos, Marc Màrquez.

Después de una locura de clasificación tomando los tiempos de unos entrenos pasados por agua, Nico salía sin nadie por delante, el último de la primera fila, en compañía de los ingleses Bradley Smith y Daniel Webb y de un Alberto Moncayo que, por vez primera salía con el horizonte limpio. Marc y Pol se vieron retrasados a la onceava y doceava posición respectivamente, lo que no impidió que dieran alcance a la cabeza de carrera a la que se apagó el semáforo y se dieron unos cuantos pasos por curva. Tras varios accidentes (iban cayendo como moscas) Pol no podía con el tirón de sus dos competidores directos cuando se dio un golpe de efecto sacando bandera roja por una lluvia que volvió a hacer acto de presencia. Aunque fuera un acto de presencia breve, fugaz. Pere Gurb, del equipo Tuenti, pedía a gritos caos, y caos es lo que hubo.

En el tiempo que transcurrió entre la aparición del trapito rojo y la bajada de la bandera a cuadros viví, como espectador, uno de los momentos mágicos que tiene este deporte, y más ahora con cámaras en todos los sitios; explícome:

Todos los pilotos que quedaban en pista se fueron a su box para cambiar lo que creyeron oportuno. Los comentaristas hacían sus apuestas, decían que todos los que se jugaban algo tenían que salir con las mismas condiciones, afirmaban que una vez en parrilla cambiarían los neumáticos con los que habían salido del box, en una jugada estratégica para ocultar sus cartas. Primera en la frente, nada de eso. Mientras daban la vuelta para incorporarse a su lugar en la línea de salida, Marc, inexplicablemente, se fue al suelo. No voy a olvidar la imagen del pequeñín de Cervera agarrado a su Derbi cuando la moto tocó la grava y giró, con las manos aferrando el manillar, creía que se rompía los brazos. Se levantó con la moto destrozada y ahí pensé que el campeón sería Nico, por su frialdad y su capacidad de analizar y pensar, y no Marc que se había ido al suelo de la forma más tonta. Decidió volver al box para reparar los desperfectos. Craso error. Despistados y desconcertados, todos hacían lo que podían para arreglar la moto, cuando la lógica hubiera tenido que imponerse haciendo marchar a Marc y arreglando la moto en parrilla. Con los boxes cerrados Marc tuvo que salir en la última posición. La desesperación reinaba en el equipo de Emilio Alzamora, las lágrimas salían de los ojos de alguno de sus integrantes, previendo el final de su trabajo, después de tantos esfuerzos y yo no daba crédito al "fregao" en el que se había metido.

Se apagó el semáforo y Marc salió como un tiro, pasando entre dos pilotos a los que despeinó seguro, y se fue en busca y captura de su enemigo en pista. Pol no hizo caso a lo que decían los comentaristas de RTVE y se la jugó, al rojo o al negro con neumáticos de agua, que le condicionaron a quedar fuera de la lucha por el cetro mundial.

Màrquez dio caza a Nico, al que ayudaba su compañero Bradley, fiel escudero. Pero Marc, haciendo caso omiso a la pizarra que le marcaba P2OK, luchó como un jabato para alzarse con la victoria. Una victoria luchada y trabajada, que borró del mapa su error de novato e hizo que se acercaran a felicitarlo pilotos como Colin Edwards. Lo dijo Bradley Smith en sus declaraciones al final de carrera -Marc merece ser campeón del mundo.

Pues eso, que nos espera un final de fiesta con traca por todo lo alto en Valencia, con el motociclismo español rompiendo récords por doquier en una temporada que tardaremos en olvidar. Ojalá sea el principio de una larga amistad. Más bien, ojalá sea el principio de una larga hegemonía.

jueves, 21 de octubre de 2010

Kevin Stuttgart entrevista a Dani "Dos Esquis"

Queridas personas que leéis mis parrafadas. La entrada de hoy es distinta a todas las que había hecho hasta el momento. Hasta la fecha, únicamente había escrito sobre lo que opinaba de ciertos aspectos que me interesaban y deseaba compartir. La entrada de hoy, en cambio, es un ejercicio periodístico en toda regla ya que he tenido el privilegio de entrevistar a Daniel Arran Ferri, un chico que, bajo el alias de Dos Esquis, lleva tiempo planeando una aventura que va a iniciar este invierno. Tanto para él como para mí ha sido una experiencia nueva. Para Dani era la primera entrevista que concedía y para mí ha sido una novedad muy emocionante hacer este juego de pregunta-respuesta. Puedo escribiros que los dos hemos disfrutado mucho, cada uno en su papel de entrevistado-entrevistador.

Pero…no perdamos el mundo de vista, así que, sin más dilación…


Kevin Stuttgart: Antes de nada quiero agradecerte que me hayas concedido unos minutos; ya sé que ahora se acercan unas fechas intensas para ti y tu proyecto.

Dos Esquís: De nada. Para mí es un placer y un honor ser la primera persona a la que entrevistas. Te agradezco mucho que des a conocer mi iniciativa desde tu blog, del que soy un asiduo lector. Y sí, realmente ahora empieza la recta final. Dentro de un mes aproximadamente empiezo a trabajar en el proyecto sobre el terreno, en Vielha.

K.S.: ¿Y ya lo tienes todo listo?

Dos: No, todavía me faltan algunos cabos por atar.

K.S.: ¿Cuáles?

Dos: Tengo que terminar de coordinar la ruta entre las distintas estaciones, ya que algunas no abren entre semana y hay que cuadrar las fechas para perder el menor tiempo posible. La incógnita de no saber cuando y en qué condiciones van a abrir algunos centros supone un handicap importante y tengo que contactar con algunas estaciones que todavía no se han puesto en marcha.

K.S.: He visto en Internet que empezaste a imaginar este proyecto unos años atrás. ¿De donde salió la idea?

Dos: La idea surgió en Cantabria una noche de insomnio, cuando trabajaba para la Cruz Roja. Por aquel entonces ya llevaba año y pico viviendo en una furgoneta que se convirtió en una casa con ruedas y estaba harto de oír, ver y leer las aventuras de los demás en la radio, en la tele o en los libros. Así que empecé a soñar una aventura desde un punto de vista muy nómada. A finales de 2008 estaba en Andorra arrancando el proyecto Nomadesdesmon, pero lo tuve que abortar a mediados de enero por varios motivos, entre ellos una pésima planificación.

K.S.: ¿Y ahora?

Dos: Ahora tiene otro enfoque. Desde entonces el proyecto ha evolucionado mucho y lo he planificado mejor. Llevo varios meses contactando con las estaciones y con las entidades, documentándome y estructurándolo todo. El hecho de haberlo intentado y haber fracasado duele mucho pero en cierto modo agradezco haber fracasado porque creo que he aprendido bastante de toda aquella experiencia; yo diría que se aprende de los fracasos porque de los éxitos solamente se disfruta ¿no?

K.S.: Creo que es un punto de vista muy constructivo y que, desgraciadamente, a veces no se valora lo suficiente. Nos olvidamos de dar las gracias demasiado a menudo, por lo menos yo, cuando las cosas van bien, pero pienso que también debemos darlas cuando las cosas van mal porque es fracasando, como bien dices, cuando aprendemos de nuestros errores. Volviendo al proyecto, si no me equivoco, consta de varias partes: un reto aventurero, un objetivo social, un documental, una guía…

Dos: Si. Primero está lo que yo llamo el “reto aventurero” que consiste en esquiar en todas las estaciones de esquí alpino y de esquí nórdico de España esta temporada 2010-2011.

K.S.: Y luego está la parte social

Dos: Exacto. Sabía que las estaciones colaboraban con distintas entidades y colectivos con el fin de facilitar el acceso al deporte a personas que no podían o que tenían grandes dificultades para ello, pero me dio la impresión de que no se le daba mucha importancia, con lo cual decidí iniciar una labor de investigación y recopilación de información para dar a conocer todas las acciones que realizan las estaciones de esquí enfocadas a colectivos de personas desfavorecidas y también de todas las actividades relacionadas con los deportes de invierno que se impulsan desde este tipo de entidades.

K.S.: Y esto, ¿lo haces respaldado por alguna asociación o algún colectivo?

Dos: Pues no. Es una iniciativa propia y privada, por mi cuenta y riesgo, vaya. Debo decir que he hablado con gente que me han alentado a seguir y que me han dado buenos consejos pero, hasta el momento, solo cuento con el apoyo y la colaboración de Graficas Altagraf, la Escuela Jemape y la web de Esquí Adaptado. Espero que la cosa cambie pero en todos lados tienes que oír que la cosa está muy mal y es un poco frustrante.

K.S.: Me lo imagino. Entonces, todos los costes del proyecto van a cargo tuyo

Dos: Bueno, como ya te he dicho espero conseguir el patrocinio de algunas marcas y de empresas que me podrían ceder parte del material que necesito para el viaje y luego cuento con el dinero que voy ahorrando. Tengo un presupuesto ajustado, pero espero que me sirva para, por lo menos, completar el reto de esquiar en todas las estaciones. Además ten en cuenta que cuando regrese todavía faltará mucho curro por hacer: lo primero será terminar de escribir el memorándum y luego intentar conseguir alguna subvención para esta parte social del proyecto. También habrá que organizar y pasar a limpio toda la información recogida para las guías, editar y montar los videos para presentarlos a festivales y concursos…

K.S.: Esos son los otros objetivos de “Con un par…de esquís", ¿verdad?

Dos: Si, perdona, que me he adelantado. Durante el viaje, aparte de entrevistarme con los responsables de las estaciones y contactar con las entidades de tipo social que hacen actividades relacionadas con los deportes de invierno, voy a documentar mi estancia en todas y cada una de las estaciones con su artículo y su ficha correspondiente para una guía que tratará todos los aspectos que quiero destacar. Quiero dar especial relevancia al turismo de vehículos vivienda, pues me parece una opción muy a tener en cuenta en un futuro y también tengo la intención de hacer uno o varios documentales con las fotos y los vídeos que haga durante el viaje.

K.S.: Bueno Dani, se nos acaba el tiempo. Dejame decirte que, en mi opinión, se trata de un proyecto muy ambicioso que espero que esta vez sí que puedas concluir con éxito, deseo que todo te salga bien.

Dos: Muchas gracias Kevin, lo mismo digo. Ya sabes que a mí me gusta mucho leerte. Ha sido un placer hablar contigo. Recuerdos a tus lectores.

K.S.: Gracias.

lunes, 18 de octubre de 2010

Egosurfing* de Llucia Ramis. El asterisco forma parte del título

Debo escribir que ha sido este uno de los pocos libros que me he leído sin que me gustara. La novela escrita por Llucia Ramis no me ha gustado en su conjunto. De principio a fin está repleto de una verborrea poética que para mi gusto es insoportable. Muy salpicada de lo que yo considero escritura automática, la autora rellena páginas y páginas con una prosa digna de un viaje de ácido lisérgico, lo que me ha provocado ciertas risas y sonrisas, aunque pocas. Creo que si quería tratar el tema de la egolatría internautica, bien podría haber elaborado un libro más ameno de leer, distinto, aunque esto es lo que, en definitiva, marca el estilo de cada escritor, y si fue merecedora del Premi Josep Pla en este presente 2010, por algo será. Yo simplemente opino y mi opinión no es muy favorable. Vamos, que si tenéis otros libros en mente, mi consejo es que podéis esperar a leer Egosurfing* tranquilamente. El asterisco forma parte del título.

Llucia nos cuenta la historia, a la que yo encuentro ciertos matices autobiográficos aunque no la conozca ni sepa nada de su vida, de una chica a la que acusan de querer matar a un chico al que le cae una bolsa de basura cuando pasea por la barcelonesa calle de Sant Pere Més Alt, rayana al Palau de la Música, desde el piso que ésta ocupó años atrás, en su época universitaria. Ella es una escritora mallorquina de la que pocos conocen su existencia hasta que una reportera la acusa por televisión de ser una presunta homicida.

Se establecerá un trío protagonístico formado por Rut, la reportera, Teo, el chico al que le cae la bolsa y la heroína sin nombre, pues mantiene el anonimato en todo el libro.

En primera persona y con saltos espaciocuánticotemporales, va narrando sus propias venturas y desventuras, cosas que le ocurren con su relación con Teo, personaje enigmático y con un pasado por analizar que trabaja en La Casita Blanca (reconocido meublé barcelonés), con Rut, la reportera aspirante a periodista mediática dispuesta a vender a su madre por tener unos minutos de fama hertziana y con Carles, amante esporádico, casado, con hijos y reportero de guerra.

La historia sigue una línea bastante plana, sin altibajos remarcables, a no ser por la inclusión de hechos y situaciones, más o menos verídicas, sacadas de la red, que le dan cierta gracia y respiro al libro.

Se me ha hecho pesado, pese a la delgadez de sus 331 páginas, en su impresión catalana por Editorial Destino. Me hacía volver a releer demasiadas veces un mismo párrafo o echarle un vistazo a la página anterior para retomar el hilo narrativo.

En fin, un libro que, en mi opinión, no merece premio alguno, aunque mi opinión tampoco cuente, al no contar cuentos. En estos casos me gustaría leer algunas de las obras que se presentaron y saber porqué se eligió Egosurfing* como ganadora sin rival, cosa que probablemente no suceda.


Feliz lectura.

jueves, 14 de octubre de 2010

Perdonen, pero ¿tienen otro planeta? Es que el nuestro está en las últimas

¡Qué liberador puede ser volver a ver el cielo después de más de dos meses con una roca como techo!

La pasada madrugada sucedió un hecho del que estuvieron pendientes más personas que del Mundial de fútbol de Sudáfrica. Es sorprendente la mediatización que se ha hecho del hecho. Gracias a la tecnología se ha podido retransmitir en vivo y en directo todo lo relacionado con ello.

Ahora lo podremos averiguar todo sobre esa gente, sus vidas, sus aficiones, el número de hijos. A mi particularmente solo me interesa saber como termina la historia del minero al que esperaban su esposa y su amante.

La realización de labores de rescate de unos mineros en Chile ha generado unos niveles de audiencia espectaculares. Si no me fallan los cálculos, uno de cada 6 habitantes de este planeta estaba pendiente de unas vidas soterradas 700 metros bajo el suelo. Ya fue todo un milagro que sobrevivieran cuando la Tierra los engulló en el derrumbe de la mina San Estebán de Copiapó, han pasado 70 días sepultados, conviviendo en compañera soledad, aislados del mundo exterior, que ha seguido girando y girando. Ellos habrán girado en sus entrañas, más cerca del corazón de Gaia.

No deja de sorprenderme la no ocurrencia de una desgracia, tanto en los momentos iniciales de esta odisea, como en los últimos instantes de la misma porque, que 33 personas sufran un accidente y queden atrapadas, se puedan localizar y se confirme su estado de salud, luego se las alimente mientras se hacen los preparativos para sacarlas de allí y encima la operación salga bien, no entraba dentro de mis pesimistas presagios. Y yo que me alegro.


No puedo alegrarme, en cambio, del vertido que sucedió en Hungría y que ya ha supuesto la muerte de siete personas y de una parte importante de la vida fluvial de este y sus países vecinos, con la amenaza de una nueva ruptura de los diques que contienen los residuos tóxicos procedentes de la transformación del alumínico metal. La desgracia ocurrida ya no me sorprende tanto, porque tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Y el cántaro se rompió, y esparció su veneno, salpicando y matando a su paso.


Es lamentable el trato que le damos al planeta que nos da cobijo, que nos dio la vida y nos mantiene en órbita, dando vueltas alrededor de un Sol que nos calienta. Igual como encuentro lamentable el trato que nos damos a nosotros mismos, permitiendo que se nos manipule y se nos explote, estando enrolados en un sistema que únicamente se perpetua en beneficio de unos pocos.

Ahora mismo yo tampoco estoy para gritar ¡basta! Escribo basta con la yema pequeña, rozando las teclas para no hacer ruido, consciente de que formo parte, de que soy parte de un engranaje de una maquinaria que no funciona bien.


Hoy se han hecho públicos unos datos que a mí me parecen escalofriantes, aunque ya hacía tiempo que se venía diciendo algo por el estilo.

Resulta que necesitamos otro planeta. Sí, sí. El nuestro ya no podrá mantener nuestro ritmo. Yo creo que a esos pocos beneficiados tampoco les interesa encontrar fórmulas para que lo haga, cosa que, por otro lado, yo encuentro que sería más fácil de lo que nos quieren hacer creer.

Mi apuesta es apoyar, propagar, propiciar y otros verbos positivos que acaben en ar, la eliminación de la industria armamentística y su reconversión en la investigación y el desarrollo de materiales y energías que sean biodegradables, sostenibles, limpias e incluso que aporten residuos aprovechables. Hay recursos y tecnología suficientes para intentarlo, lo cual es básico para poder seguir habitando en este mundo y no tener que emigrar a otro, con el más que probable trágico y dramático resultado para ese planeta y sus habitantes.

El otro día, con un colega, tuve este presentimiento: imaginamos un futuro próximo, como en las películas o las series de ficción, pero no seríamos nosotros los que seríamos sometidos al yugo de una especie alienígena, como la mayoría de ficción nos muestra.

Nosotros seríamos los tiranos, los chungos. Ya lo somos actualmente entre nosotros y la Historia nos demuestra que siempre hemos tiranizado y nos hemos aprovechado de lo que hemos considerado una civilización inferior, ya fuera por razones de raza o de religión, aunque siempre, al fin y al cabo, lo hayamos hecho por motivos económicos.

Y será la economía, en mi opinión, la que nos destruya si no cambiamos nuestra forma de ser. O lo hace la economía o lo harán unos extraterrestres más chungos que nosotros.











miércoles, 13 de octubre de 2010

Dos de una tacada. Japón y Malasia.

Tenía una cuenta pendiente con mi afición a las dos ruedas ya que todavía no había escrito nada sobre las dos últimas carreras y quiero transcribir algunas de las sensaciones que me transmitieron.


Las imágenes que quedaron grabadas en mi retina fueron las de los adelantamientos entre un Valentino Rossi que volvía por sus fueros y un Jorge Lorenzo que se tuvo que rendir a la evidencia.

Y lo evidente es que pocos pilotos hay capaces de disputar y ganar de tu a tu al campeón de campeones que es Il Dottore. Gustará más o gustará menos pero el caso es que el italiano ha llegado a dominar estas maquinas a un nivel tan alto que puede permitirse el lujo de arriesgar y apurar y trazar las curvas por sitios que otros pilotos ven como una trazada imposible de hacer sin terminar besando el duro y gris asfalto. Porque Valentino es así, y se mete por donde puede y sale por donde le dejan, y no se cae. Y todo le sale bien. ¿Todo? Todos lloran cuando Valentino les hace una treta de las suyas...pero él también llora. Y me haré pesado con esto, pero no olvidaré el cabreo que le pilló cuando Toni Elías se lo fulminó en Portugal, ganándole la partida sin contemplaciones. El manresano impuso su garra y tuvo su buena dosis de suerte para ese día.

Cuando oí las declaraciones de Lorenzo tras la carrera, un poco enfadado por la actitud de su rival de equipo, no entendí muy bien cual era el motivo de la queja. O el mallorquín no ha visto nunca competir a Rossi o yo no lo entiendo. Vamos a ver Jorge: si sabes que el puto crack de los últimos tiempos montado sobre una moto sobre el alquitrán está en la situación que está, que hace tiempo que no gana y tiene un hambre que ni una barra de pan con su crema de cacao se la quita y que, además, esto de la lucha cuerpo a cuerpo le tira más que un caramelo a un niño ¿pa qué te metes? Si tienes un colchón de puntos y entras al trapo, ya sabes lo que hay, Valentino no va a dar su brazo a torcer, por mucho que te tenga que echar una mano.

Las declaraciones de Rossi, sin embargo, eran lo que son siempre, una explicación vista desde su propio prisma, justificando unas acciones que benefician el espectáculo, aunque en Yamaha estuvieran mordiéndose las uñas.

Para mí es indudable que esas dos últimas vueltas crean afición y que, si no se caen, por mi pueden seguir.


Y seguirán, es indudable, aunque el mallorquín demostrara este último fin de semana que se guardaría muy mucho de pelearse con alguien que sabe que le puede. De Japón nos llevaron a Malasia y en una semanita volvíamos a tener motos, para nuestro goce y disfrute.


Esta vez no había que madrugar tanto y a las siete menos nada el que escribe ponía el televisor en marcha para deleitarse con otra exhibición del pequeño gran Marc Màrquez que se pone líder en el octavo de litro.

Y luego vino Moto2.

Me pongo de rodillas y le hago la ola a quien creo que se merecía un Mundial desde hacía mucho, mucho tiempo. Me encanta su forma de pilotar, la imagen que da, lo que dice y como lo dice. Pero ha sido el típico caso de falta de suerte. Cuando reparten suerte, a algunos no les toca nunca y este parecía ser el rol que tenía asignado Toni. Perder, por un motivo o por otro, la mayoría de ellos injustos. Pero Toni no se ha rendido nunca y al final la estrella, su estrella, le ha guiado hasta conseguir de una puñetera vez su primer título mundial. Espero que sea el principio de una gran amistad entre él y las victorias. Felicitats Toni! A ti y a los tuyos.


Con mi querido Dani Pedrosa fuera de combate y anunciando que no iba a correr en Sepang, Jorge lo tenía muy fácil para erigirse como justo campeón y relevar a Àlex Crivillé como segundo español en conseguir un título mundial en la categoría reina. Lo único que tenía que hacer era conseguir una novena posición, algo que ya ha demostrado que podía lograr sin demasiado esfuerzo, viendo su historial esta temporada. Y lo hizo.

Evitando peleas innecesarias cruzó cuarto la línea de meta. Y hubo gran regocijo.


Quiero hacer un apunte. Un apunte con un velo de tristeza que he preferido dejar para el final, para no ensombrecer de buenas a primeras este retomar de escribir sobre las motos.

Después del terrible accidente que sufrió Shoya Tomizawa, ese maldito accidente que nos dejó huérfanos de un piloto con mucho talento, de quien todo o casi todo se ha escrito ya, se llegaba al Gran Premio de Japón, a disputar en el circuito de Motegi. Me causó mucha impresión ver la entereza con que la familia recibía las muestras de condolencia, como el libro en el que los aficionados pudieron escribir y transmitir sus mensajes de pésame o el trofeo al mejor piloto de la categoría, así como la retirada de su 48, que ya ningún piloto volverá a lucir en su carenado.

Analizándolo en frío y en mi opinión, el trofeo Michel Métraux no tiene mucho sentido en esta categoría, ya que por un lado se premia al mejor piloto privado y en Moto2 todos lo son y en este circo todavía no se ha representado la ultima función. Además, el mejor piloto ha demostrado serlo nuestro grandísimo Toni Elías, que por fin tiene la recompensa a tantos años de esfuerzos, sacrificios y desesperantes decepciones.

Fue un bonito gesto por parte de todos los pilotos; un gesto que, como los otros, la família agradeció con una serenidad y una compostura dignas de los samurais. Nos vemos en Australia.


martes, 5 de octubre de 2010

Veinte días

Hace veinte días tuve que interrumpir mi modus vivendi para inmiscuirme y entrometerme en el fascinante mundo de las labores remuneradas y constatar, de paso, que la maldita precariedad, los abusos por parte de un despótico y tacaño empresario y el acongojamiento al que se somete a una persona por medio de la coacción laboral, o sea, situaciones que ya había sufrido anteriormente, siguen vigentes a día de hoy, apenas una semana después de la famosa y por mi considerada estúpida huelga general. Sí, esa mamarrachada general orquestada por unas entidades que solo alzan la voz cuando ven peligrar su situación y que hace mucho tiempo que dejaron de defender la libertad de los trabajadores y trabajadoras y se integraron en la pantomima del mal llamado derecho a trabajar, que debería pasar a llamarse derecho a ser esclavizado por un sistema que únicamente lleva a la destrucción de la felicidad. Y es la felicidad, en mi opinión, el último motivo por el cual creo que estamos aquí y el sublime sentido de la vida.

Tema aparte es la violencia que mostraron ciertos individuos y que merece un artículo él solito y que apunto como tarea pendiente.


El derecho a trabajar se ha ido convirtiendo en el derecho a ser explotado y privado de libertades y aspiraciones. ¿Qué libertad puede tener una persona que no puede crear nada? Esta persona que tiene que hacer malabares para ajustar su nómina o sus ingresos, cuando llega a la casa que tanto le cuesta pagar no tiene energías para nada más que para levantar el mando a distancia y encender la caja tonta para evadirse de su asquerosa y mal pagada rutina laboral. Mal pagada en todos los sentidos, tanto económica como creativamente: -¿Para qué me voy a esforzar en pensar una mejora para mi puesto, si la respuesta va a ser que si no me gusta como está ya me puedo largar?


Han sido veinte días de promesas y engaños, de agacharse y poner el culo en pompa para que una pareja de negreros se fueran turnando y ganando dinero a costa de ponerme el orificio rectal como la bandera de Japón. ¡Eh, y con disponibilidad absoluta!

Veinte días de ilusionarme en tener un contrato con un buen sueldo que me permitiera ir construyendo parte de un sueño futuro.

Veinte días de incertidumbre, de no saber qué día podría librar y dedicarme a hacer aquello que realmente me motiva y me aporta un mínimo, aporta una pequeña parte de felicidad a mi alma.

Veinte días en un lugar con unas condiciones de higiene dignas del peor retrete de los anuncios de Cillit Bang.

Veinte días. El penúltimo de estos ha dejado mi oreja amoratada y dumboide gracias a un tremendo golpe que me propinó una barra de hierro en mi pabellón auditivo izquierdo y que hizo que se me hinchara como un tomate transgénico, sin acudir al centro médico por no estar ni contratado ni asegurado, evitando así una complicación a una gente que no se ha complicado lo más mínimo en soltarme que me pagaría trescientos euros por esas veinte jornadas.

Veinte días con una sola mácula que, de haber estado cubierto con todas las de la ley, se hubiera podido subsanar sin más.

Veinte días de comprobación de unos hechos que no solo sufro yo, sino que son una constante en la comarca en la que vivo.


Por suerte han terminado, aunque mi lucha no ha hecho más que empezar. Comienza ahora un agotador y cansino viaje por los laberínticos caminos de la legalidad para conseguir reclamar y obtener la cantidad de dinero que creo que me corresponde y, a poder ser, la debida cotización a las arcas de la Seguridad Social.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Una noche de perros

No es que haya pasado una mala víspera, ni que los canes hayan ladrado protegidos por el amparo de la oscura nocturnidad.

Una noche de perros es la primera obra del ácido actor que interpreta al igualmente ácido Dr. House. Y esa acidulidad se hace patente en esta obra. Hugh Laurie ha reescrito una novela de espías como si hubiera visto demasiadas veces la pelicula Top Secret.

La historia en sí viene a ser la típica novela de espías y contraespías, con personajes varios que van desde el honesto fracasado que se gana la vida como puede, lo que se traduce en meterse en líos de lo más embarazosos, a policías corruptos, jefes de policía ingenuos, el malo malísimo y su séquito y alguna mujer que otra.

El libro ha tenido la gran suerte de ir mejorando página a página y de que yo tengo más paciencia que un santo en cuanto un escrito cae en mis manos. Le cuesta mucho tomar forma y parece divagar entre varias opciones hasta que se define la trama y se mete de lleno en ella.

Si seguís mi consejo y lo leéis, yo no haría caso a las reseñas que lo alaban y lo ensalzan hasta niveles que, en mi opinión, no creo que merezca.

Las páginas rebosan ironía. Esta ironía, al principio es muy cansina para mi gusto. Luego la cosa cambia y no sé si es porque uno se va adaptando a la pluma mordaz o que el tono se vuelve más suave y se centra en la acción y no en el sarcasmo.

Es un libro que tiene momentos divertidos, como no podría ser de otra forma conociendo el currículum del escritor. Me ha sorprendido saber que ya hacía tiempo que había visto su cara y reído con sus gestos, como os sorprenderá a vosotros si no habéis indagado o nadie os lo ha dicho. Me refiero al pasado de Hugh, cuando interpretaba a varios personajes en “La víbora negra”, serie que me hizo pasar muy buenos ratos.

La cosa empieza con una escena de acción trepidante y se sitúa en Londres, en donde discurre buena parte de la novela. Me fue imposible no ver al popular doctor luchar cuerpo a cuerpo o montar en su motocicleta por las calles y carreteras inglesas mientras leía. Poco a poco van apareciendo personajes más o menos relevantes y la trama se traslada a otros lugares que no son difíciles de visualizar.

Hay un trasfondo que encontré interesante como lector y persona y que revelaré de una forma muy superficial. Se trata del comercio de armas y de todo el entramado que ello conlleva, aunque no daré más datos para no romper la magia de la lectura.

En fin, un libro entretenido pasadas unas cuantas de las 315 páginas que tiene y que permiten descubrir el talento especial que para la escritura ha demostrado tener Hugh Laurie. Espero leer pronto su segunda novela y así poder definirlo un poco mejor.

La estupidez de esta huelga general

Esta va a ser mi forma de protestar contra el día de hoy. Protestar contra el Gobierno por la toma de unas medidas que no van a ayudar a mejorar nada. Pero también protestar contra la actitud de unos sindicatos que solamente se decidieron a actuar cuando vieron sus intereses perjudicados.

Esta huelga no va a ayudar a nadie, nadie va a salir ganando. Y no creo que esto interese ni a unos ni a otros.

El día en el que los sindicatos han forzado una huelga general yo pretendía acudir a mi lugar de trabajo remunerado y sin contrato laboral. Un lugar con unas condiciones de higiene pésimas y un horario de lo más abusivo. Pretendía acudir a trabajar como forma de protesta hacia la postura que han tomado los sindicatos y que desde mi punto de vista no prioriza la defensa de los derechos de todos los trabajadores, únicamente de aquellos que les interesa, el funcionariado, ya que solamente cuando vieron que se recortarían sus privilegios decidieron poner el grito en el cielo y movilizarse escudándose en sus ya sabidas reivindicaciones. Mientras tanto estuvieron dos años discutiendo con la patronal sobre el fondo y la forma sin llegar a ponerse de acuerdo mientras el número de parados aumentaba y el Gobierno tomaba más y más medidas contrarias al criterio socialista, obligado en cierta medida por los mandatos de la UE.

En vez de empezar a agitar las masas desde el principio, fueron chupando del bote, haciendo ver que hacían algo y escurriendo el bulto.

Una vez confié en los sindicatos. Confié en su tarea de defensa de unos derechos que me han sido negados continuamente por parte de todas o casi todas las personas/empresas que me han contratado y que siguen siendo pisoteados a día de hoy, con la impunidad que les confiere un ministerio de Trabajo que cada vez que les pido ayuda me demuestran su incapacidad para realizar una función de inspección sin poner en peligro mi nómina.

Porque si los sindicatos no defienden como deberían a todas las personas que trabajan, el departamento de Inspección de Trabajo se autoinmoviliza, excusándose en la presentación de una denuncia para llevar a cabo una actuación.

Y todos sabemos lo que ocurre cuando se presenta una denuncia ante la empresa. O lo sabremos nosotros, los de a pie. Los que tenemos que trampear la situación tan bien como podemos. Los que no creo que lo sepan son los que estan sentados con un montón de papeles en la mesa de algún despacho, ya sea sindical o ministerial. Y si lo saben les importa una mierda.

Quejas e indignaciones por un recorte de un 5% del sueldo mientras hay trabajadores que llevan con el mismo salario desde hace años, teniendo que escuchar que la cosa está muy mal y que hay mucha gente esperando para ocupar ese puesto e incluso cobrando menos que la miseria que les dan.

Pero no he podido ejercer mi derecho a trabajar ya que la persona que me explota, con y sin reforma laboral, decidió darme fiesta hoy, supongo que por miedo. Yo no entendía que miedo se puede tener a unos sindicatos a los que no se les ve el pelo ya que en La Cerdanya los servicios son tan precarios que no confiaba en verlos por aquí, pero bueno.

Supongo que si la huelga se hubiera enfocado hacia la problemática real que nos afecta a todos, tanto a empresarios como a trabajadores (problemática que yo entiendo como la salvación del sistema financiero en detrimento de los derechos de las personas) hubiera secundado, animado y promovido el paro de toda actividad para el día de hoy; incluso me hubiera negado a escribir. Pero los motivos de esta huelga son otros y, aunque creo que esta reforma que se quiere imponer es una salvajada, no lo son menos otras medidas que ha tomado el Gobierno y que no han provocado movilización alguna, aún siendo claramente negativas para un mal llamado estado del bienestar. Por este motivo hoy, y a pesar de tener la impresión de que existe un piquete informático que me impide desarrollar correctamente mi labor, voy a hacer una especie de huelga a la japonesa y colgaré este escrito y otro de propina.

Por otro lado, oyendo y viendo las noticias que se van sucediendo y que narran los acontecimientos de hoy me doy cuenta de lo triste y patético que resulta la repetición de los mismos. Piquetes que impiden con razones más o menos poderosas el derecho al trabajo que tiene cualquier persona. Personas que critican las actuaciones de estos piquetes. Personas que ejercen sus derechos libremente, cualesquiera que estos sean. E informaciones que se contradicen dependiendo de quien las diga. Es la sensación de estar navegando tranquilamente en la tormenta más absoluta. Todos anuncian el éxito de sus intervenciones a bombo y platillo, jactándose de haber creado el caos total o de haber conseguido que la jornada discurra con una total normalidad.

En mi opinión, esta huelga no va a servir para nada más que para generar perdidas y en la que no se va a ganar ningún beneficio.

Y si se hace una huelga general debe ser para sacar algún provecho y no para que se aprovechen unos cuantos. Es por ello que considero una estupidez esta huelga general.

lunes, 6 de septiembre de 2010

La reina en el palacio de las corrientes de aire

He cerrado el libro sabiendo que no iba a saber nada más acerca de Lisbeth Salander ni del Kalle Blomkvist de los Cojones. Quizá se termine editando el cuarto tomo cuando cesen las disputas entre los allegados de Larsson pero hasta que ese momento no llegue, nos tendremos que conformar con lo que hay, que no es poco.

Me gustaría apuntar que hubiera preferido que tradujeran de forma literal los títulos y no intentar buscar metáforas retorcidas para darles nombre a estas obras de arte.


No me ha costado demasiado leer la tercera parte de la trilogía Millennium de Stieg Larsson. No me ha costado en cuanto a tiempo se refiere, ya que la multitud de nombres ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza. No hubiera estado de más sumar a las 847 páginas un anexo con todos los nombres y el papel que desempeñan en la historia, problema que también ocurre en los otros dos anteriores, aunque en este último ha sido más acusado. Si alguien lo desea puede consultar en Wikipedia donde encontrará una larga lista con los personajes principales. Asimismo, recomiendo leer el artículo de Gabriela Wiener publicado en El País titulado “La cara de los dos millones de copias”, donde hallareis una anécdota curiosa sobre los dibujos que ilustran las portadas de los libros.


Un final abierto, que se deja a la imaginación del lector para que pueda soñar con múltiples soluciones. Emocionante de principio a fin, sólo ha tenido algunas páginas anodinas, demasiado recargadas de información irrelevante para el caso pero que contribuye a la confusión y al grosor del tocho.


Me ha gustado comprobar que los aparentemente pobres conocimientos de gastronomía del autor se habían ampliado a algo más que carne con salsa de vino tinto. Lo que dudo es que se pudieran ampliar los límites de la imaginación del autor, algo que, con su fallecimiento en 2004 de un ataque al corazón, nunca descubriremos jamás.

Como reza su biografía, la formación periodística de Larsson iba ligada a una reconocida ética anti violencia, cosa que se refleja en sus libros; creo que hace falta un talento innato para convertir una historia como la que imaginó Stieg Larsson en una obra que enganche, como si de droga dura se tratase, de la forma en que lo hizo la trilogía Millennium.

Debe ser esa la diferencia entre un buen escritor y un escritor. Tener el talento, la capacidad y el ingenio de transformar una fábula creada por el intelecto en páginas y páginas de relatos intrigantes, amorosos, aventureros...no es moco de pavo. Se trata de un trabajo que, en mi opinión, pocos parecen valorar. Aunque también despierta en mí un sentimiento de frustración, al no verme capaz de escribir nada que merezca tales calificativos ni de lejos. Pero ese, es mi problema.


En definitiva, me ha gustado mucho la forma de escribir de Larsson y repito que es una pena no poder seguir sus aventuras. Si alguien se entera de algún digno sucesor suyo, le ruego que me avise, cosa que agradeceré. Feliz lectura.

domingo, 5 de septiembre de 2010

G.P de San Marino. Descansa en paz Shoya.

Desde este sitio en el que hago públicos mis pensamientos quiero dejar un mensaje. Esta crónica está teñida de negro. Las lágrimas han salido de mis ojos al conocer la lamentable noticia. Donde quiera que esté el alma del joven piloto Shoya Tomizawa, seguirá luchando contra el cronómetro, junto a su compatriota Kato y otros tantos que han muerto en el asfalto...y fuera de él.

Hacía tiempo que no se lloraba una pérdida en el campeonato del Mundo, aunque hoy me enteraba que la semana pasada, Pete Lenz, un niño-piloto de 13 años, perdía también la vida en Indianapolis.

Siento una pena muy grande. Los gritos, la emoción, el levantarte del sofá chillando como un poseso viendo como la élite del motociclismo se la juega por ganar un puesto a sus rivales; todo ha terminado de golpe con las palabras que Ernest Riveras decía, muy a su/nuestro pesar, que el japonés había perdido la vida.

Cuando algo así sucede, cuando alguien muere haciendo algo que le gustaba, suelo pensar que aunque duela, por lo menos, se fue al otro barrio haciendo lo que quería, lo que le apasionaba, su leit-motif. Descansa en paz Shoya, estés donde estés. Desde mi profundo yo, esto va a ser el sencillo homenaje que voy a dejar para ti.


Antes de saber

Marc Màrquez terminó imponiéndose con autoridad frente a un Nico Terol que no consiguió resistir los envites del de Cervera. Pol no pudo pasar de la sexta posición y se constata que, de momento, es incapaz de seguir el ritmo de su compatriota. Efren Vázquez subió otra vez al podio y completó un escenario completamente español.

Nunca puedes decir, o escribir, que de esta agua no beberé, y menos viendo el espectáculo que ofrecen los pilotos y sus monturas, pero la eliminación en 2012 de la divertida categoría de 125 c.c. sumada a la nueva de moto2, y las cosas que estoy viendo últimamente, me hacen pensar que esta reconversión del campeonato del Mundo de velocidad se va a convertir en un monopolio extraño que no me va a gustar. Espero equivocarme aunque esta mañana he pensado seriosamente en pasarme a ver las Superbikes o incluso el CEV si no hay mejoras sustanciales que sean de mi agrado. Aunque siempre ha habido cambios. Se quitó la de 50, la de 350, este año ya no tenemos al cuarto de litro. ¿Renovarse o morir? Seguramente, pero insisto en pensar que una categoría monomarca sólo es buena para los intereses de unos pocos con todo lo que ello conlleva.


Milagrosamente y como ya imaginé ayer cuando todos le tenían miedo a la primera chicane, nadie se fue al suelo en los inicios de moto2. Iannone volvió a repetir el error de Montmeló y se movió lo suficiente como para ser sancionado con un ride trough. Toni Elías tardó 3 vueltas en empezar a marcar vuelta rápida y deshacerse de los pilotos que le estorbaban y tras siete vueltas emocionantes, las aguas se empezaron a encauzar y el de Manresa tomó una ventaja que le permitió gestionar sin problemas su victoria. Constatando que Olivé no remonta ni cambiando de moto iban pasando las vueltas. El bravo Pasini quedaba out y cuando todo estaba en una relativa calma, un espectacular accidente me dejó helado. En él se vieron involucrados Scott Redding, Alex de Angelis y Shoya Tomizawa. Ha sido muy rápido y espectacular, la verdad es que pensaba que pararían la carrera.


Este ha sido el fatídico accidente que le ha costado la vida al japonés.


Espero que sepáis perdonarme, pero casi todo esto estaba escrito entre moto2 y el inicio de motogp, cuando, aún sabiendo que el accidente era grave, la confianza que tengo o tenemos en que los pilotos estan hechos de otra pasta, dotados de una casi invulnerabilidad, me hacía pensar que, aunque gravemente herido y en coma, Shoya se recuperaría.


La alegría por el alto el fuego de ETA, las bromas que quería hacer sobre el deporte español, quedan relegadas a un futuro en el que me sienta con ánimos de hacerlo.

Por ahora solo puedo callar y dar mi virtual pésame a todo aquel que sienta la desgracia de haber perdido al piloto.

Que el viento siempre te lleve el olor de los cerezos en flor y de esa mezcla de gasolina, aceite y goma quemada.



sábado, 4 de septiembre de 2010

El callejón de los milagros

Hoy quiero colgar la impresión que me produjo leer el libro de Naguib Mahfuz El callejón de los milagros.


Ha sido la primera vez que leía algo de este autor, fallecido hace cuatro años. No lo conocía, ni a él ni a su obra, cosa que voy a ir enmendando poco a poco ya que me ha dejado muy buen sabor de ojos. Este autor, primer árabe en conseguir el premio Nobel de Literatura en 1988, está considerado como el referente de la literatura árabe contemporánea. Y yo sin saberlo. Pues nunca es tarde si la dicha es buena, y en este caso lo es.


He leído la versión catalana, traducida por Isaïes Minetto y Josep Franco de Edicions Bromera. Me gustó, de entrada, que no tuviera prólogo. No sé por qué me fastidia leer un prólogo, pero me aburre sobremanera; lo encuentro tan cansino. No quiero escribir que no sea necesario, pero la sensación que me da, la mayoría de las veces, es que se lo podrían ahorrar.


Tiene 314 páginas que se leen casi sin quererlo, deseando que tuviera 300 más y siguiera relatando las vidas de los habitantes de ese mísero callejón de el Cairo en el que se ambienta la novela.

Un simple callejón, la calle Midaq, que encierra todo un universo de dulces vivencias, como los dulces que prepara Kamil, aventuras y desventuras, enamoramientos, momentos trágicos y situaciones un tanto cómicas, de un humor más bien gris, como el humo del hachís que fuma Kirxa el propietario del café.


La acción se sitúa, aunque no aparece ninguna fecha concreta, en la Segunda Guerra Mundial, con la población dividida entre el ejército británico y las fuerzas alemanas, con el único interés de sacar el máximo partido de la situación, sin decantarse por un bando o por otro.


El libro muestra la cotidianidad de una calle, un submundo dentro de una gran ciudad y relata muy bien la forma y el trato que se dispensan sus habitantes, con el nombre de Dios en casi cada frase dicha, con el carácter y las costumbres típicas de un pueblo y una religión, que impregna cada conversación y cada acto.


Con sus palabras, Naguib Mahfuz me llevó a el Cairo, en un callejón cálido y polvoriento, del mismo color que las dunas del desierto, y me dejó allí, contemplando la belleza de Hamida, admirando el trajín del bazar, comiendo los dulces de Kamil mientras escuchaba las sabias palabras de Radwan o Darwish y veía a un mendigo deformado por Zaita, oliendo el pan recién hecho de Yaada y Husniya a quienes saludaba el doctor Bushi.


miércoles, 1 de septiembre de 2010

De regreso de las vacaciones

Ayer me recordaba un ser querido que tenía esta parcela de mi vida un poco olvidada. Como todo hijo de vecino, este servidor se había tomado unas vacaciones, inmerecidas totalmente. Pero es la ventaja de ser tu propio jefe: tú decides cuando trabajar y cuando dedicar tu tiempo a quehaceres más importantes (entiéndase por quehaceres importantes tumbarse en el sofá a chupar tele, leer, ir a la piscina a tomar el Sol o trabajar en otros proyectos).

La verdad es que no encontraba motivos que realmente me hicieran sentarme delante de la pantalla y transmitir mis pensamientos al resto del Mundo. Los medios informativos no son lo mismo sin sus grandes estrellas y si bien es cierto que no por ser verano el planeta deja de girar, en período estival o las noticias pierden gran parte de su interés o somos más bien nosotros somos los que perdemos el interés por las noticias. ¿Será el calor? ¿El bochorno atenúa y apacigua el ánimo? Probablemente.

Además este verano tampoco he encontrado noticias que me hayan influido exageradamente. Podría haber escrito sobre los incendios que asolaron los alrededores de Moscú o las inundaciones que hicieron lo propio en Polonia o el reciente regreso a casa de los secuestrados Roque Pascual y Albert Vilalta, pero yo ¡estaba de vacaciones!

-No has escrito ni sobre las motos. Me decía.-Y ya han hecho dos carreras.

Las motos. Pues si tengo que escribir sobre motos empezaré recordando que me cagué en Dorna, en dirección de carrera, en la FMI, en el realizador y en la madre que los parió a todos ellos, este domingo pasado. Tal cual. La gracia de ver las carreras por la tele es que puedes seguir los acontecimientos. Menos cuando hay un gilipollas tras los mandos que en vez de transmitir imágenes interesantes del encuentro hace un seguimiento exhaustivo de una caída, con repeticiones desde varios ángulos por si se nos escapa algún detalle o con planos eternos del interior de los boxes que no interesan una mierda mientras en el asfalto los pilotos luchan por ganar y/o no perder una posición. En este aspecto la cosa no mejoró en ninguna de las tres carreras.

Me pareció indignante que sancionaran a Màrquez con 20 segundos, tras hacer una remontada espectacular debido a que se cayó cuando iba escapado. Sí, se cayó, levantó su moto, pasó a los últimos puestos que le permitían ganar puntos y a partir de ahí fue escalando posiciones hasta cruzar por línea de meta en 5ª posición. Pero cometió un fallo, hizo un recto y aunque esperó para pasar a la acción y proporcionarnos un final de carrera espectacular, dirección de carrera se lo hizo pagar, en mi opinión, de forma exagerada, relegándolo a la décima posición, cuando iba octavo antes del fallo. Aplicación estricta del reglamento.

Valoración positiva, pese a todo, de los nuestros, con 7 pilotos españoles entre los 12 primeros, con Nico Terol como ganador y Pol Espargaró, que parece haber perdido fuelle, en tercer lugar. Entre ellos Sandro Cortese subía al segundo cajón del podio.

Antes del turno del inicio de moto2 anunciaron que emitirían un reportaje de las carreras de dirt-track que se celebraron el sábado por la noche. Lo esperaba con expectación y fue un chasco; imágenes cortadas de los pilotos en acción, comentarios del hijo de Dennis Noyes que no revelaban grandes novedades y un montaje que no me terminó de gustar.

Nada más empezar la carrera de la nueva cilindrada, hubo un par de accidentes con varios pilotos involucrados, algo tristemente habitual en esta categoría, lo que provocó que se parara la carrera.

El reglamento impide que un piloto tome la salida de la siguiente carrera si no vuelve con su moto al box en cinco minutos. Esto impidió que Álvaro Bautista y Aleix Espargaró pudieran finalizar en Sachsenring. Pero USA es USA y quienes se fueron al suelo en moto2 fueron, nada más y nada menos, que los yanquis Jason Di Salvo y Roger Lee Hayden. Este último corría en el equipo American Honda, equipo que tiene como Team Manager a Kevin Schwantz, ídolo donde los haya e icono del motociclismo. En el momento que se anunciaba que R.L. Hayden y Di Salvo quedaban excluidos de la segunda carrera, la cámara enfocaba a un Kevin Scwantz corriendo tras uno de los jueces. Y esta vez el realizador tuvo a bien de seguir enfocando como discutía con él el tiempo necesario para ejercer su influencia y conseguir que su piloto retomara la salida. Y como ya se había roto el reglamento para uno, Di Salvo también se benefició y pudo salir en la segunda tanda. Muy bonito. Todo un ejemplo de que las normas se pueden modificar dependiendo de quién sea el afectado, algo que la FIM siempre ha negado por activa y por pasiva. Coincido con Ernest Riveras en su indignación y añado la frase que o follamos todos o petamos la muñeca hinchable.

Con todas las motos rodando otra vez el manresano hizo gala de la fuerza sobrehumana que tienen los pilotos y se sobrepuso a todo un fin de semana con fiebre, ganando la carrera con una gran maestría y su particular y habitual lección de pilotaje. Detrás suyo llegó un magnífico Julián Simón y completó el pódium Scott Redding.

Motogp fue un recital para Dani Pedrosa, imponiéndose con su arte y magistral dominio por delante de un inspirado Ben Spies que corría en casa. En tercer lugar llegó un Jorge Lorenzo que no mostró tanta efusividad como cuando termina ganando a sus rivales, con sus teatrales celebraciones. Esta vez la teatral celebración se tornó en melodrama. Curioso. Debe ser la costumbre.

Volviendo a la dejadez veraniega, tampoco he escrito sobre los libros que me he leído en estas últimas semanas, esperando mi turno para leer, ansioso, el tercero de Millennium, que ya tengo en mis manos (para ser exactos no lo tengo en mis manos (ya que no podría escribir), está en la mesa del comedor).

Se presentan días de frenética actividad por mi parte y por la de mi álter ego, o sea que no avanzo nada ni prometo cosas que luego no podré cumplir. Ya se verá. Es un placer volver a la carga. Hasta pronto.



martes, 3 de agosto de 2010

Salir del armario lingüístico

Me pareció tan interesante este artículo que me llegó vía facebook que no pude hacer otra cosa

que llamar a la oficina de elSingulardigital.cat y exponerles mi intención de traducir el artículo y

colgarlo en mi blog. La idea es que se haga difusión de la realidad que se vive día a día en

Catalunya y que no es, ni mucho menos, (en mi opinión) tan catastrofista como algunos se

empecinan, diariamente, en hacer creer a una parte del personal. El que se deja.


Quiero agradecer la cordialidad y amabilidad de Xavier March al darme permiso para realizar la

traducción de su trabajo, siendo muy caprichoso el Destino al hacer que fuera él quien descolgara

el auricular. Y, de paso, aprovecho para felicitarlo por haber hecho difusión con su entrevista del

trabajo que han realizado los psicólogos Ferran Suay y Gemma Sanginés. Y ya puestos con los

agradecimientos, hacerlo extensivo a los autores del libro,ambos miembros de la Societat

Valenciana de Psicología y de Tallers per la Llengua, cuya ardua tarea les ha llevado a condensar

en 172 páginas un libro para que el uso de su propia lengua no suponga, para los catalanes, sufrir

un calvario.


http://www.elsingulardigital.cat/cat/notices/2010/07/_ldquo_parla_en_catala_fins_que_l_rsquo_altra_persona_et_digui_explicitament_que_no_t_rsquo_enten_55144.php

Entrevista a Ferran Suay y a Gemma Sanginés, autores de “Sortir de l'armari lingüístic”(Salir del armario lingüístico)

por Xavier March

Habla en catalán hasta que la otra persona te diga explícitamente que no te entiende”

Un grupo de cinco personas mantienen una conversación en catalán. De repente se añade un nuevo miembro castellanohablante y todos cambian de idioma automáticamente.



Según Ferran Suay y Gemma Sanginés, autores de “Sortir de l'armari lingüístic” (Ed. Angle), detrás de este comportamiento hay una explicación psicológica. Partiendo de este punto, Suay y Sanginés elaboran una "guía práctica" para evitar el "estrés" que puede generar hablar en una lengua minorada.

Por primera vez se aborda el conflicto lingüístico desde la vertiente psicológica.

Hablar es una conducta y los psicólogos analizamos conductas. Los grupos sociales están configurados por personas. Y éstas, en un momento determinado, escogen una lengua u otra.¿Por qué lo hacen? ¿Cómo lo hacen? Como lo pueden cambiar? En estas cuestiones interviene decididamente la psicología.

Hasta ahora los estudios provenían de la lingüística o la sociología.

Tradicionalmente se ha hecho mucho énfasis en el aspecto de la conciencia lingüística. Se ha dado por hecho que aquel que tiene conciencia lingüística tiene una conducta coherente con esta. Pero esto no suele ocurrir. Una persona puede tener una gran conciencia lingüística y cambiar al español en la mayoría de sus situaciones cotidianas.

¿El catalanohablante necesita una guía para utilizar su lengua como es debido?

Cualquier lengua minoritaria lo necesita, no es una cuestión exclusiva del catalán. A menudo nos dicen que es una lástima que necesitemos libros como éste. Sí, quizás es una lástima, pero realmente lo necesitamos. Los hablantes de lenguas normalizadas, con países normales y situaciones políticas normales no necesitan nada de todo esto, claro, pero no es nuestro caso.

A diferencia de otros territorios, ¿el catalanohablante debe sobreponerse a un rechazo del castellanohablante?

El gobierno español es hostil a la lengua. Boicotea, por ejemplo, los intentos de llevar el catalán a Europa. Esto tiene una filtración a los hablantes. Ese prototipo de castellanohablante que se siente agredido cuando se le habla catalán y quiere imponer su lengua a diestro y siniestro tiene apoyo en las instancias superiores, tiene el ejército a su favor.

Entonces, ¿es más bien un aspecto político que histórico?

Todo suma, pero al final el bagaje histórico se traduce en unas relaciones de poder, y las actuales dicen que el español es una lengua de primera y el catalán una lengua de segunda. Nosotros no hablamos de historia ni política, pero sí analizamos como entran todos estos aspectos en el cerebro de las personas y cómo les genera timidez lingüística

¿Timidez lingüística?

Una persona tímida es aquella que, a pesar de conocer sus derechos, no se atreve a hacerlos valer. Es lo que sufren muchos catalanohablantes. Dudan de si deben hablar en catalán o no, de si tienen que hablarlo con un estándar culto o más llano, de si tienen que pedir perdón cuando el otro no habla catalán.

Y si hacemos un diagnóstico general, ¿cuáles son las principales consecuencias que sufre el catalanoparlante?

A nivel cognitivo se dan una serie de dudas que provocan la sensación constante de que los demás son más importantes que nosotros. Pero a nivel fisiológico también se generan reacciones. Aumenta la frecuencia cardíaca, el malestar, la tensión muscular. A nivel de conducta, el catalanohablante puede tener un comportamiento muy incoherente, puede enfadarse sin una razón aparente, por ejemplo. En definitiva, se crea malestar y estrés.

¿Hablar catalán es, pues, estresante?

Puede serlo. El catalán es un factor que incrementa la probabilidad de sentirse desbordado. Estar estresado es no tener suficientes recursos para hacer frente a las situaciones que te vienen encima. Hablar catalán significa hablar una lengua que está minorada. ¿Y quien está realmente minorado? La lengua no, ésta sólo es una abstracción. Los que están minorados son los hablantes y ser minorado por la sociedad es un factor de estrés.

Aspectos que no sufren los castellanohablantes a pesar de estar en Catalunya.

Una persona que decide vivir en español en Catalunya, vivirá una o, como mucho, dos situaciones de conflicto lingüístico. En cambio, alguien que decide vivir en catalán en Catalunya se encuentra situaciones incómodas o de cuestionamiento casi a diario. Si no adquiere recursos para afrontar estas situaciones, éstas se convertirán en estrés. Y éste se va acumulando.

Una situación anómala producida por una situación política ...

También anómala. La nuestra es una lengua subordinada porque somos un pueblo subordinado. Son otros los que mandan y los que imponen la lengua y esto tiene unas consecuencias sobre el hablante individual que tenemos que aprender a afrontar si queremos ser. Cuando un país alcanza la mayoría de edad, la independencia, puede decidir qué es lo que más le conviene, pero este no es, hoy por hoy, nuestro caso.

Mientras en ámbitos como la educación o la administración el catalán ha caminado hacia la normalización, la realidad en la calle es muy diferente. ¿Detrás de este hecho podemos encontrar una explicación psicológica?

No queremos caer en el error de decir que la clave es la perspectiva psicológica. Siempre hay una explicación política, sociológica e histórica. La culpa no es de las personas, este comportamiento no está en nuestros genes. La manera más eficaz de cambiar todo esto es hacerlo de arriba abajo. Con una buena política lingüística y una política nacional coherente, a todo esto se le puede dar la vuelta.

¿Hasta ahora esta política lingüística no ha sido la adecuada?

No diría que las políticas lingüísticas han fracasado. La Generalitat ha hecho varias campañas, siempre constreñidas por las posibilidades reales de actuar de un país subordinado. No mandamos nosotros y no se puede hacer una buena política lingüística si no se puede hacer, de entrada, política propia.

Sin embargo. nuestros políticos ¿tal vez deberían haber tenido más mano dura en el aspecto lingüístico?

Nuestros políticos están atados de pies y manos. Otras lenguas han partido de posiciones peores que la nuestra y actualmente están totalmente normalizadas. El caso de Estonia, por ejemplo. Puedes ser independiente y perder la lengua, pero necesitas ser independiente para conservarla.

Para defender nuestros derechos lingüísticos hace falta cierto espíritu reivindicativo. ¿Creen que los catalanes luchamos bastante por nuestra lengua?

Cataluña es un país muy saludable a nivel asociativo. Pero los mismos que configuran este tejido social, en muchas ocasiones, no llevan sus reivindicaciones al uso cotidiano. Muchas veces, en conceptos lingüísticos, no somos coherentes entre lo que pensamos y lo que hacemos. Así, acabamos yendo a un bar, y pidiendo un "cortado".

Pero esta es una lucha cotidiana que puede llegar a ser muy pesada.

Si haces que luchar por el catalán sea algo antipático y que genera conflicto haces que la gente abandone el barco. Tenemos que luchar y presentar esta lucha como algo atractivo y amable. El objetivo es mantener la lengua y sentirse cómodo utilizándola.

¿Por ejemplo?

Con la inmigración. La actitud de un inmigrante depende mucho más de la sociedad receptora que de la emisora. Si encuentras una realidad consistente allá donde vas, te adaptarás rápidamente. Si no la encuentras, muy posiblemente no lo harás. Los recién llegados lo harán todo para poder vivir aquí, pero si nosotros no les transmitimos qué deben hacer o qué deben hablar, ellos no lo harán.

¿Nuestro comportamiento lingüístico con el inmigrante no es el adecuado?

Cuando nos dirigimos a ellos les hablamos normalmente en español y cuando alguno de ellos nos habla en catalán nos hace cierta gracia. Está bien valorar aquel inmigrante que aprende el catalán, pero elogiarlo en exceso puede llegar a incomodarlo.

Todos estos automatismos no son fáciles de cambiar.

No, pero podemos hacerlo. Hay que empezar por tomar conciencia, darte cuenta que es un mal

hábito y que hay que cambiarlo. Empezar por lo más fácil y seguir avanzando hacia los retos más

difíciles.


Y a medida que vamos mejorando en este sentido, ¿cuál debe ser nuestra actitud cuando

alguien se nos dirige en español?


Intentar emular normalidad. Mantener la l
engua, no asumir ningún prejuicio tipo 'no me entenderá' y utilizar los recursos que utilizarías normalmente para comunicarte. No se trata de no hablar nunca en español, simplemente de mantener el catalán hasta donde podamos. Mi recomendación sería hablar en catalán hasta que la otra persona te diga explícitamente que no te entiende.