Esta madrugada hay que retrasar la hora.
Es una de esas cosas que uno no termina de entender, como tantas otras. Siempre que llega esta fecha, se debate la utilidad de esta medida. En mi opinión, lo ideal seria guiarnos siguiendo siempre el horario del Sol. Hace años que se cambió debido a una crisis del sector energetico. Se antepuso el uso de la energía a la propia biología del ser humano y por ende, de todo lo que lo rodea. Estoy pensando en algo tan tonto como los animales de un zoológico; imaginaos al pobre elefante que está ahí encerrado, que le importan un bledo nuestras crisis energéticas y nuestros cambios de horario y que se le fuerza a adaptar sus instintos animales a nuestro ritmo de vida.
Algo mas serio es el tema de los recién nacidos, cuyas necesidades siguen unos escrupulosos horarios, que tardan relativamente poco en adaptar, pero que no dejan de molestar, sobretodo, a sus padres.
Antes, cuando uno devoraba la noche, estos días eran especiales. Significaban mas juerga, fuera en primavera o en otoño. Se jugaba con el reloj, prolongando hasta el límite el cierre de la discoteca, y a esas horas de la madrugada poco importaban el ahorro energético o el origen de la polémica medida.
Polémica tambien ha sido la decisión de retirar únicamente el pasaporte a Felix Millet a principios de semana.
Empiezo a sospechar que el antiguo director del Palau de la Música no es más que una cabeza de turco. No quiero que se interprete de estas palabras que lo encuentro inocente y libre de toda culpa; lo que hizo es vergonzoso y una muestra más de hasta donde llega la codicia de la burguesía, la aristocracia, la política, el feroz mundo empresarial y todos los tiburones que forman este sistema. Oigo los lamentos de gente que explica como se tumbaron varios de sus proyectos con la excusa de la falta de dinero, mientras ese dinero servía para llenar los bolsillos de ladrones de guante blanco (algo parecido a lo que le dicen a mi alter ego al pedir un sueldo más elevado). Ladrones de guante blanco, supongo que del mismo blanco que el color del vestido de novia con el que se casaron sus hijas, con tentáculos de cefalópodo, con dedos de pianista, por las teclas que han llegado a tocar, con mas cara que espalda y la jeta más dura que el hormigón armado. Con un morro que se lo pisan, morros de cerdo, claro, que han ido con pies de plomo durante casi quince años, enjabonando a partidos políticos que ya estaban bajo sospecha. Millet y Montull son los personajes que han salido a la luz y contra quienes el pueblo llano escupe y vomita toda serie de infortunios, preguntándose el motivo que impulsa a un juez a meter en la cárcel a un cualquiera y dejar en libertad a un pez gordo. La mayoría de nosotros nos hemos preguntado porque la justicia es tan parcial. No es que sea ciega, es que mira para otro lado con un descaro abochornante.
Y, lo que sospecho, es que los que oscuramente se han aprovechado de estas actuaciones, a ellos ya les va bien que la plebe cargue contra los M, no se hurgue demasiado en la herida y el tema se vaya olvidando, como tantos otros, conforme transcurran partidos de fútbol, debates sobre economía, discusiones entre Gobierno y oposición, etcétera, etcétera, etcétera. Porque no olvidemos que ellos creen que somos tontos. Y tampoco olvidemos que les damos motivos de sobra para creerlo.
Cambiando totalmente de tema, este domingo, aparte de cambiar la hora, por la madrugada se disputa el G.P. de Malasia de motociclismo. Hago este apunte porque me ha venido a la cabeza cierta similitud entre Álvaro Bautista en 250 c.c. y Dani Pedrosa en Motogp. Ha sido un pensamiento fugaz. Se tenía una gran esperanza depositada en ellos en el momento de subir de categoría, y una vez allí, no han podido dar el do de pecho, rematando la faena y llevándose el campeonato a casa.
Mañana es muy posible que Valentino Rossi sea otra vez campeón del Mundo, por octava vez ya, acumulando titulos y engrandeciendo lo que es toda una leyenda viva de las motos. No creo que quiera llegar a Valencia con el título por decidir. Recuerdo cuando lo ví caer, en vivo y en directo, perdiendo el campeonato a favor de Nicky Hayden y como el circuito enmudeció y gran parte de sus seguidores se marcharon a casa antes de que la carrera terminase.
Antes de despedirme quiero hacer un inciso. He recibido un correo electrónico en el que se describen formas políticamente correctas para la no discriminación del sexo femenino en escritos, presentaciones, al hablar…Quiero pedir perdón, pues mi tendencia es escribir de forma políticamente incorrecta, aplicando un machismo inconsciente, que no por inconsciente está menos lleno de culpa. Intentaré aplicar estos conocimientos, pero: uno.) bastante tiempo me lleva escribir estas cuatro rayas como para corregirlas de forma que nadie se sienta ofendido/a. Y dos.) tampoco he recibido ninguna queja al respeto.
Me voy a fijar más a partir de ahora y espero cambiar estos hábitos.
Esto es todo por hoy. Buen fin de semana a tod@s.
Fe de erratas
ResponderEliminarMis disculpas a los fans de Valentino. Si mañana lo consigue será su noveno título mundial.